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30 THE JAGUAR La recolectora silvestre Pauliina Tovainen (a la izquierda) y el fundador de Everfells, Robert Nuorteva, (arriba) simbolizan la profunda conexión que los finlandeses tienen con la vida al aire libre y la naturaleza. Abajo: El I-PACE es una forma serena de explorar este aspecto de Finlandia
RUTA DEL DESTINO lado de un lago, cerca de la ciudad. Forma parte de la vida y se da por hecho. Quedamos con Robert Nuorteva en una cafetería de Helsinki. Es el fundador de Everfells, una empresa nueva que pone en contacto a guías con personas que buscan experiencias. Robert reconoce este impulso colectivo finlandés. «Todos los finlandeses conocemos la sensación de conducir de la ciudad a tu cabaña», dice. «Sales del coche, cierras la puerta y el silencio te inunda. En la ciudad jamás se puede encontrar ese silencio, siempre hay ruido de fondo. En las cabañas, todo está silencioso. El silencio perfecto». Cuando conducimos el I-PACE hacia el bosque finlandés, el silencio nos inunda antes de salir del coche. Ser eléctrico significa una conducción silenciosa. Para alguien que se ha criado con un motor de combustión, es irreal. ¿Me he perdido algo?, te preguntas. ¿Es así de fácil? Pues sí que lo es. Tras media hora conduciendo por el bosque, esta «facilidad» empieza a materializarse. Se puede ver en la pantalla que se viaja a mucha velocidad, pero solo se oye la cadencia suave de los neumáticos sobre la nieve. No hay silencio equiparable con el silencio del invierno ártico. Los finlandeses hablan de cinco estaciones: hay pleno invierno e «invierno primavera». En pleno invierno, el sol apenas sale. La gente vuelve a su cabaña, calienta la sauna tradicional y hace agujeros en el lago helado para bañarse. Las saunas son quizás el prototipo original de gran parte de la arquitectura moderna de Finlandia, con su estructura de madera. Como explica Markku Janhonen, oriundo de la región de Karelia y guía de la naturaleza, para los finlandeses la sauna es algo casi sagrado. «Es normal que estemos callados en la sauna», dice. «Es un lugar silencioso para relajarse y observar el lago». La sauna ha sido un espacio sagrado para los finlandeses desde antes del cristianismo: un lugar de reflexión e incluso un lugar donde las mujeres daban a luz. Hay algo en el silencio finlandés, y la agudización de los sentidos que produce ese silencio, que parece pertenecer a conocimientos más antiguos. « EL SILENCIO AGUDIZÓ MIS SENTIDOS. ME DI CUENTA DE QUE MI PERCEPCIÓN EMPEZABA A AUMENTAR» Por ejemplo, Markku explica la importancia del tono en el patinaje de fondo sobre un lago en invierno. «El sonido del hielo mientras patinas te informa de su profundidad», dice. «Cuando el tono aumenta, el hielo es más delgado». La recolectora de alimentos silvestres Pauliina Toivanen, de Helsinki Wildfoods, nos habla del olfato. «Nuestra memoria olfativa es muy importante», explica. «Aprender a reconocer los olores de las plantas venenosas y las no venenosas. Cuando ya las diferencias, realmente, no las confundes». Puede no haber nada que recolectar cuando la veamos, pero hasta la dureza del invierno es una buena noticia. «Las plantas crecen con más fuerza», dice. «Para luchar contra el frío, las bayas generan más polifenoles». Está esperando savia de abedul, la primera recolección de primavera. Después comerá brotes y hojas de abedul, diente de león, ortiga, serba y laurel de San Antonio. Pauliina recuerda cuando salió a caballo por la noche en Kuusamo, la zona ancestral de donde procede, al norte del país. «Fue una experiencia increíble ya que la noche y el silencio agudizaron mis sentidos. El caballo se orientaba de noche, pero enseguida empecé a notar que mi percepción empezaba a aumentar. Al final, podía ver con más claridad y mi oído se había agudizado. El chasquido de las ramas al romperse retumbaba en el silencio de la noche». Nos pareció que esta también era nuestra experiencia. El Jaguar I-PACE es silencioso por naturaleza y, cuando va en su habitáculo, el silencio aumenta por la encapsulación del motor, la laminación acústica del parabrisas y el diseño aerodinámico que minimiza el ruido del viento. También es una calma que agudiza los sentidos. Cuando detiene el I-PACE, sale de él y cierra la puerta, empieza a escuchar los pequeños ruidos: el crujido de la nieve debajo de sus pies, un pájaro carpintero martilleando, el viento ululando entre los pinos. Pero, sobre todo, oye el sonido del silencio. THE JAGUAR 31